Esta es una crónica muy personal de cómo viví la recién terminada Serie Final entre Gigantes del Cibao y Leones del Escogido. Con sufrimiento recibí la noticia de que tendría que estar viajando las semanas del 12 al 23 de enero a Puerto Rico y Trinidad & Tobago, por lo cual estaba obligado a seguir la clasificación del Round Robin y el inicio de la Serie Final por Internet. Luego de los largos y contundentes cuadrangulares de Wilson Betemit, el mismo sabor amargo que sintieron todos los fanáticos escarlatas en el estadio comenzó a invadirme sin poder evitarlo; como pensando: Betemit ha tenido su venganza! Su último jonrón contra Santiago Casilla, apagó al estadio completo que le coreaba “La Beti”. Sin embargo luego vino el error de Wilson Valdez en el 9no, poniendo la mesa para que continuara cumpliéndose la ley de promedio. Esa principio estadístico que expliqué a mi hermano menor esa noche, diciéndole que los Gigantes habían jugado la serie tan bien, sin errores, sin descalab...
Un espacio para el análisis